“Un
héroe lucharía hasta el fin… pero él no era ningún héroe, era
un protagonista accidental de un cuento de terror y estaba aterrado”
La
noche del cetrero es una novela
de fantasía épica que trastoca todo lo establecido. Es verdad que
se suele decir muy a menudo que tal o cual novela es muy original y
muy diferente, muchas de las veces, siendo todo lo contrario. Pero en
este caso, es cierto.
Y se ve
en lo más importante de la historia: su protagonista. Estamos ante
un personaje que para nada es un héroe; no es valiente ni es fuerte.
Tampoco es un bravo guerrero ni un experto espadachín. La gente le
ignora y es un desastre en casi todo. Por si fuera poco, no es
simpático ni un bromista. Es feo y no tiene carisma pero, a pesar de
todo, te encariñas con él y quieres saber qué le pasará. Porque
sufre. Y sufre mucho.
La
historia que nos cuenta es todo el viaje que este personaje, Roland,
el cetrero real, tiene que hacer desde la Ciudad de la Frontera, para
avisar a un poblado cercano de la proximidad del enemigo. Se podría
pensar que Roland crece, evoluciona y se convierte durante ese viaje
en algo parecido a un héroe. Nada más lejos de la realidad. Y no
involuciona porque es imposible ser más inútil.
Es un
bonito cambio dentro del género que también podemos ver en Canción
de Hielo y Fuego: no hay héroes y no podemos asegurar si
terminará o no la novela con vida.
Por otro
lado, La noche del cetrero es
una novela con escenas muy potentes y visuales: "Roland
sabía que era imposible pero vio convulsionarse el cuerpo colgado,
como si acabasen de colgarle hace unos segundos". Otro ejemplo
bastante bueno es un camino que describe rodeado de estacas, con
cuerpos empalados y una fosa común de calaveras, no solo humanas.
Javier crea y muestra escenas de gran crueldad sin preservativos,
mostrada totalmente a pelo, para el “disfrute” del espectador.
Tampoco os asustéis, no es un libro gore, así que vuestros
estómagos están a salvo.
No solo
construye escenas fabulosas como la anterior. También destaca por
frases geniales como una pregunta, casi lanzada al aire: “¿cuánta
muerte cabe en este bosque?”
Como toda
buena novela fantástica, el mundo que nos presenta está lleno de
criaturas imposibles, sacadas en este caso del
olvidado folclore español como las lamias. “La inclusión
de estos personajes es un guiño a nuestras propias leyendas”.
Incluye otros seres como animales antropomórficos, vampiros y alguna
que otra sorpresa. Crea así una bella e interesante mitología donde
los dioses son fundamentales.
La
cosmogonía en la que se basa, choca, como no podía ser de otra
manera, con la Religión, que trata de imponerse por la fuerza entre
los humanos y destruir a los no humanos “puesto que solo los
hombres honraban a la Cruz. (...) la Cruz era la señal de Dios y
donde estaba Dios los no humanos no podían acceder”. No se
especifica cuál es, pero todo apunta al catolicismo. En palabras de
Javier: “la semejanza con el catolicismo es clara, pero podría ser
cualquier religión, me he tomado la libertad de jugar con la
Inquisición y demás, pero no he llegado a cerrar lo del
catolicismo, es una religión con semejanzas... nada más...”
Según se
va adentrando en el bosque, y tú en el libro, te das cuenta que
Roland está viviendo una suerte de purgatorio, cruzando este bosque
infinito y ciclópeo durante una noche que parece no tener fin. La
gran pregunta es ¿tiene alguna meta este viaje? Al final parece que
sí, que obtiene incluso su recompensa.
Como
sorpresa final, Javier nos plantea una última prueba. Es esta una
novela con dos finales. El primero, el que todos queremos leer, el
que parece que Roland se merece. Pero por otro lado, y solo para los
lectores mas exigentes, hay un final alternativo, más apropiado,
pues encaja mejor con el resto de la novela. Como si uno de esos
libritos de 'Elige tu aventura' se tratara, es el lector quién
decide como termina. ¿Cómo terminará tu Noche...?
Ángel G Ropero
--El Bunker
Los lunes de 17.30 a 19.00 en Radio Ritmo Getafe y siempre en el podcast.
Fue la primera novela que leí de Javier Fernández (y no la última, por supuesto), y lo cierto es que me encantó.
ResponderEliminar¿Cuáles nos recomiendas?
Eliminar¿De Javier? Pues también me gustó mucho "Un ejército para Hans". Tiene un estilo muy diferente porque, aunque hay fantasía, la novela narra las vivencias de un niño holandés durante la ocupación nazi.
EliminarApuntado queda!
EliminarÁngel, muchas gracias por la fantástica reseña, Roland estaría agradecido.
ResponderEliminarGracias a ti por mandarnos el libro.
EliminarUn saludo